HISTORIA

Centro Industrial de Mantenimiento Integral:
una historia de progreso

Por Héctor Vecino Rueda
Instructor Comunicaciones

Alimentando el gusto por la historia, escudriñando entre páginas amarillas que han sentido el paso del  tiempo e indagando entre algunos que fueron pioneros en esta historia de progreso, intenté reconstruir los años que ya se fueron, la huella del Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA, en el municipio de Girón.

El 3 de octubre de 1968 “fecha escogida por el SENA y la Embajada Británica”, nació el Centro Piloto de Fundición, ahora conocido como Centro Industrial de Mantenimiento Integral. De eso hace ya 45 años.
Es curioso, pero de esto no es fácil encontrar registro, apenas hay una mención en el acta 270  del 10 de junio de 1970, del Consejo Seccional del SENA, en la cual se advierte que se hicieron presentes en el acto el Ministro de Ultramar de Inglaterra y altos funcionarios del Gobierno colombiano.
La pista se pierde después del 25 de septiembre de 1968, cuando luego de inspeccionar la obra, Rodolfo Martínez Tono, director nacional, definió que la inauguración sería el 3 de octubre o en enero de 1969, con la presencia del presidente Carlos Lleras Restrepo. La opción fue la primera.
El Sena Regional Santander, o lo que se mencionaba como regional Bucaramanga ya tenía 10 años, había nacido el 11 de marzo de 1958 y este era tal vez su primer gran reto y podría decirse, su primer hijo.
Habían transcurrido casi cuatro años desde que Mr. Norman E. Langdale, jefe de la misión técnica de Inglaterra, de profesión ingeniero mecánico y metalúrgico llegó a Bucaramanga para presentar la iniciativa de una escuela de fundición, con un área de 2.700 metros, 15 talleres, aulas, oficinas de administración, cafetería, servicios sociales y en un segundo esfuerzo zonas deportivas y una piscina. Las aulas separadas de los talleres para evitar el ruido.
“Bucaramanga requiere de un centro de fundición, debido al estado en que se encuentra la industria metalúrgica, procurando pasar de una industria ligera a una industria pesada. Una vez el Centro esté funcionando, habrá un gran progreso para Bucaramanga”. Así consta en el acta 166 20 de enero de 1965 Consejo Regional del SENA.
Para esto se hacía necesaria la participación de la División de Ingeniería y Arquitectura de la Dirección Nacional y todo el equipo de profesionales para diseñar la licitación y por supuesto la consecución de los terrenos adecuados para esta obra, en lo cual puso empeño el director nacional y así le fue reconocido: “El Consejo Seccional del SENA en Santander, deja constancia de  reconocimiento por la magnífica acogida que ha tenido en la Dirección Nacional del SENA, el proyecto de un Centro Piloto de Fundición para la seccional de Santander y agradece al Dr. Rodolfo Martínez Tono la eficaz gestión que tuvo a bien adelantar para obtener la ayuda del gobierno de Inglaterra…”.
Los primeros terrenos visitados para levantar el edificio estaban ubicados en Girón en cercanías de Trefilco y otros adyacentes a la desaparecida empresa Funimag (donde hoy funciona Dana-Transejes); sin embargo la compra de los terrenos debía hacerse con supervisión de la Dirección Nacional, para lo cual llegaron a Bucaramanga los ingenieros Heberto Cediel y Robertulio González. El dinero necesario para la compra que era $1.500.000, se solicitaría a manera de préstamo a la Compañía de Seguros Bolívar “para la adquisición del lote para el Centro Piloto de Fundición y para atender los gastos iniciales de construcción y dotación del mismo…”. (Acta 172 del 31 de marzo de 1965).
Ninguno de los predios clasificó. El 12 de mayo de 1965 se aprobó la compra por un millón de pesos, de un lote ubicado “cerca del cruce de la autopista Bucaramanga-Girón, con la carretera en construcción Café Madrid-Floridablanca a razón de $10 metro cuadrado y una cabida aproximada de 10 hectáreas, según la propuesta de Bernabé Prada, Evila Prada de Angulo, Guillermo y Hernando Prada Otálora.
Luego del visto bueno de los delegados nacionales, el avalúo del Instituto Agustín Codazzi y el concepto técnico de la Contraloría General de la República, se acordó la entrega de arras a los vendedores por valor $250.000, el 26 de agosto de ese año y se dieron las facultades al director seccional para adelantar los documentos pertinentes.
En junio de ese mismo año Mr. Langdale regresa a Bucaramanga para ponerse al frente del proyecto y en septiembre recibe la visita del subsecretario del Ministerio de Desarrollo inglés y del primer subsecretario de la embajada inglesa, quienes traen el propósito de suministrar a nombre de su gobierno el equipo necesario para el Centro de Fundición.
Se hace entonces ineludible la contratación de un ingeniero preferiblemente mecánico y un dibujante como asistentes del señor Langdale.  Mario J. Peñas, entonces un recién egresado de la Universidad Industrial de Santander, quien posteriormente sería el primer director del Centro Piloto de Fundición, es contratado para el cargo
La escritura pública 2.023 se protocolizo en la notaria primera de Bucaramanga, siendo notario principal el Dr. Aquileo Mendoza y firmada por el entonces director seccional Héctor Cubillos Pinzón, el 1 de octubre de 1965, por un valor total del predio de $1.111.000; en esa fecha se hizo entrega de los $ 861.000 pendientes para el pago del terreno, donde se cultivaba caña y tabaco y de una extensión total de 11 hectárea, 2.925 metros y 8 decímetros cuadrados, en el sitio llamado Angulito y en los predios La Lomita, El Triangulito y Fátima.
El proceso se puso en marcha y ya en mayo de 1966 se tuvieron los primeros planos arquitectónicos, que desde entonces sugerían la canalización de la quebrada de la Iglesia. Para octubre del mismo año ya se había adjudicado el contrato para los estudios y los cálculos estructurales, asignados a Pedro García Arenas por un valor de $ 6.930. De igual manera se necesitaban los estudios hidráulicos que permitieran la canalización de aguas lluvias, la canalización de corrientes y las instalaciones sanitarias, que se le asignaron a Jorge Alberto Chacón y ejecutada por Jorge Chávez.
Todo iba muy rápido, tanto, que hasta se propuso la primera planta de personal, integrada básicamente por un director de centro, un instructor de moldeo y fundición y otro de modelería, lo mismo que una mecanotaquígrafa y un celador.
Hechos los procesos necesarios, conocidos los planos topográficos con el correspondiente guiño de la Dirección Nacional del SENA, se hace el proceso de adjudicación, siendo entregada la obra para su construcción a la firma Martínez Villalba & Cía., cuya propuesta era la más ajustada a los promedios definitivos y se anuncia la llegada desde Inglaterra de una remesa con maquinaria y equipos de dotación. (Acta 218, 16 de mayo de 1967).
Todo estaba listo…mejor, casi listo, lo único que faltaba era un puente que permitiera pasar por encima de la quebrada de La Iglesia, que hasta entonces con sus crecidas, limitaba cualquier actividad de aprendizaje. Para la construcción del puente el municipio de Girón se declara sin recursos, por lo cual la Jefatura de Valorización Departamental de Santander le propone al SENA aliarse con la empresa de fundición Funimaq para sacar adelante la iniciativa, que tenía un costo estimado en $105.000, de los cuales el SENA aportaría $35.000 (acta 225, 29 de noviembre de 1967).
Vendrían entones las contrataciones de la red eléctrica con la firma Gómez y Arango y la pavimentación de los accesos adjudicada al señor Antonio Niño.
Así, luego de este proceso, de muchos ires y diretes, del esfuerzo y la gestión de muchos santandereanos destacados, el 3 de octubre de 1968 nace la Centro Piloto de Fundición, ahora conocido como el Centro Industrial de Mantenimiento Integral.
Tal vez muchas personas se queden por fuera de este relato, pero lo cierto es que este lugar se convirtió algunos años después en el Centro Nacional de Fundición y en sus inicios contó con 14 profesionales de fundición  y dos ebanistas, entre quienes estaban Antonio Muciante, Pedro Pablo Navarrete, Rubén Niño, Marcos Eudes Reyes, Absalón León, Cristóbal Santos y César Rojas Gallardo, Igualmente se contó en su momento con tres conductores, Humberto Rueda, Jaime Carreño, quien además fue el primer mensajero de la regional Santander y don Luis, así no más, a quien  cariñosamente le decían cepillo.
El servicio de vigilancia, que para entonces lo prestaban funcionarios del Sena, recordará los nombres de Aurelio Rueda, Laureano García y Raúl Cárdenas Carpio, lo mismo que a don Bernardo Rey.
Como no recordar a los primeros jardineros Marcos Barrera y Ernesto Parra, así como a la primera persona que prestó sus esfuerzos en servicios generales, la señora Flor María Piñeres.
Durante estos 45 años, el hoy Centro Industrial de Mantenimiento Integral ha contado con profesionales que han estado al frente de la administración; inicialmente Mario J. Peñas en el Centro Piloto de Fundición y posteriormente Reinaldo Benítez Tavera, Avelino Jaimes, César Rojas Gallardo y actualmente Claudia Celina Marín Ariza, así como en la época de los supervisores a José Antonio Sandoval, siempre respaldados en la función de secretarias por Luz Marina Dulcey, María Helena Ríos, Norma Osorio Toloza, Martha Rueda, Nohora Isabel Buenahora y Azucena Ríos. y en otros servicios no menos importantes,  Clara Inés Pinto, Lucila Piñeres, Leonor Soler y la trabajadora social Carmen Cecilia Vega, por mucho tiempo responsable del bienestar de aprendices;  Otoniel Vega e Isidro Ortiz como responsables del mantenimiento general del Centro, este último aún sigue con nosotros, luego de 33 años y 7 meses de estar vinculado con el SENA.
Con la llegada de nuevas tecnologías, el Centro incursionó en la metalmecánica con los tornos, fresadoras y la mecánica de mantenimiento, con profesionales como Mario Pedraza, Luis Ramón Galvis, Rafael Reyes, Pedro Ojeda, Ovidio Tello, José Manuel García, Luis Enrique Salazar, Alirio Valero, Carlos Julio Galeano, así como otros más recientes como Hernando Martínez, Pedro Chía, Mario Jiménez, Rodrigo Acevedo,  González, Luis Everardo Rodríguez y algunos que todavía se mantienen vigentes como Héctor Mendoza y Jorge Eduardo Peña Rey.
 Y en las materias llamadas de humanidades, ahora módulos o competencias de política institucional, el cartagenero Ever Sedano (deportes), Fernando Estévez Mantilla y Jairo Fernández en ética y Joaquín Carrillo en química. 

De muy grata recordación los sacerdotes capellanes, como los padres Crispín Landinez, Francisco, Jorge Flórez y Miguel Jaimes, así como Víctor Arias y Yeiner Carrascal recientemente.
En el último lustro, luego de ser el Centro Industrial de Girón, se adoptó el nombre de Centro Industrial de Mantenimiento Integral, por un lado haciendo eco de su perfil medular en mantenimiento y segundo por la característica fundamental de la formación que imparte el Sena.
Nuevas épocas, nuevos retos
Liderado por Claudia Celina Marín Ariza, como subdirectora, se han alcanzado nuevos logros de la mano de nuevas tecnologías y un modelo pedagógico que ha evolucionado acorde a los tiempos modernos…
Cada época tiene sus propias exigencias y al mismo tiempo sus propias soluciones, en esto nuestro  Centro de Formación no es la excepción. Con la entrada del nuevo milenio llegaron igualmente nuevos retos, pero igualmente nuevas posibilidades para mostrar el talento Santandereano en los grandes escenarios del saber y de la formación.
Durante la última década se ha realizado un trabajo de equipo, especialmente en el fortalecimiento pedagógico y la formación continua de los instructores, para dar respuesta a la misión institucional en lo que tiene que ver con la formación por competencias y la estrategia metodológica de proyectos.
Tanto instructores como aprendices del CIMI han dejado en alto el nombre de Colombia, en procesos de formación auspiciados por el SENA en la Escuela Nacional de Ingenieros de Metz en Francia, Alemania, el País Vasco, Estados Unidos, Brasil y México, lo mismo que en competencias internacionales, destacándose la presencia en las olimpiadas worldskills  Regional, Nacional, Américas e Internacional, con presencia en  Brasil,  Inglaterra y recientemente en Leipzig , Alemania, donde han demostrado sus habilidades y competencias, ante medio  centenar de países de todo el mundo.
Para responder a la demanda de la comunidad y sus ansias de formación profesional, el CIMI cuenta actualmente con  un equipo de 245 profesionales en diferentes redes de conocimiento (161 contratistas y 64 funcionarios de planta) instructores, administrativos, trabajadores oficiales y personal de apoyo para los  distintos procesos y procedimientos.
De igual manera, siguiendo las políticas nacionales, se ha fortalecido el Sistema integrado de Gestión para garantizar la calidad de los procesos y procedimientos, que han sido plasmados en la promesa de valor de la entidad, donde  destacan el cuidado por el medio ambiente, la seguridad y la salud ocupacional, lo mismo que la seguridad informática. Nuestro centro se encuentra certificado desde 2008 y recertificado en 2012 en la norma NTCGP1000:2009 que aplica para entidades públicas.
Una de las tareas fundamentales tiene que ver con el fortalecimiento del programa de bienestar  de aprendices, donde además del apoyo actitudinal personalizado se tiene una apoyo  directo  las familias, encuentro y escuelas de padres, soporte psicológico, monitorias, refrigerios y apoyos de sostenimiento, recientemente el diseño de una ruta de transporte en las jornadas mañana y tarde; todo esto con el fin de lograr una formación integral y un bajo índice de deserción por circunstancias económicas o sociales.
El emprendimiento como política SENA y del Gobierno nacional, así como la actualización tecnológica no se han quedado por fuera de los esfuerzos por hacer del CIMI una institución grande, no en vano se han realizado  10 ferias del  emprendimiento ‘creando futuro’ y 9 semanas técnicas, con el apoyo de empresas de la región.
Nos empeñamos en construir un CIMI cada  vez más humano. Recientemente se ha trabajado  en el sistema de liderazgo y en él mismo, el voluntariado de servicio con acciones de apoyo a entidades como la fundación Sanar de alivio al cáncer de niños, así como aportes en mercados y medicinas a los aprendices que han sufrido alguna calamidad o  que no cuentan con recursos económicos suficientes. El CIMI hizo presencia a través de una aprendiz en la Jornada  Mundial de la Juventud que presidió en Brasil el Papa Francisco en julio pasado e igualmente con ese sentido humano, el Centro Industrial de mantenimiento Integral ha estado atento a las necesidades de formación de poblaciones vulnerables como damnificados por  catástrofes naturales, desplazados por la violencia, madres cabeza de familia y juventud en riesgo, así como presencia en las veredas y corregimientos con el programa de jóvenes rurales emprendedores  
Entre las recientes adecuaciones locativas que permiten un mejor desarrollo de las competencias de los aprendices, se encuentra el ambiente SENA-FACT certificado internacionalmente, el ambiente de electrogasodomésticos en convenio con la empresa HACEB, la adecuación de 2 campos de entrenamiento para redes de distribución de energía eléctrica en convenio con la ESSA –EPM, Academia CISCO, MICROSOFT, FESTO, BOSCH y la adquisición de equipos de última tecnología para todas las redes de conocimiento por un valor superior a los 6.000 millones de pesos. Se ha dotado de mobiliario, equipos de cómputo  y nuevas colecciones nuestra Biblioteca la cual permite a los usuarios la consulta de por lo menos cien mil ejemplares de la biblioteca virtual SENA.
El CIMI no ha estado ausente de las competencias nacionales  e internacionales:
-         En 2010 fuimos ganadores de la primera competencia FORMULA SENA, un proyecto interdisciplinario que permitió la fabricación de un monoplaza tipo fórmula, actualmente desarrollamos el monoplaza FSS2e con el cual esperamos ganar nuevamente la FORMULA SENA ECO 2012-2013 esta vez en una versión 100% eléctrico , la competencia se llevará a cabo el próximo 9 de noviembre en el autódromo de Tocancipá; hace apenas unos 15 días obtuvimos el 1er puesto en la primera competencia de innovación automotriz organizada por las UTS con nuestro “Buggy FS3”
-         En 2011, fuimos ganadores del desafío twitter, con la presentación de un proyecto en 140 caracteres y apenas hace 8 días en Bogotá 2 de nuestros aprendices obtuvieron el primer puesto en una competencia organizada por la firma Siemens, ellos irán a participar en unos meses en una feria de conocimiento en Alemania.
-         Olimpiadas FESTO, Campus Party, Sena Innova, Senasoft y otro sinnúmero de certámenes han visto pasar con gloria a nuestros aprendices.
-         Un punto especial merecen nuestros instructores, en los últimos 3 años más de 20 de ellos han tenido la oportunidad de formarse y recibir transferencia en diversas partes del Mundo, Estados Unidos, Japón, China, España, Alemania, Francia, Inglaterra, México, Brasil  han sido algunos de los países donde nuestros instructores se han formado para venir luego a fortalecer las competencias laborales y humanas de nuestros aprendices.
Y finalmente como herramienta del mundo contemporáneo, el programa de bilingüismo, que le permite a nuestros egresados estar al día con las exigencias de la globalización y ponerse al día con las exigencias de un mundo que ha adoptado como su idioma común el Inglés.
45 años son una historia de oportunidades y posibilidades que queremos desde el CIMI seguir construyendo y deseamos que sean muchos años los que  Dios y la vida nos regalen para ayudar desde esta pequeña porción, a construir una Colombia grande, respetada y libre como reza la oración patria.





Fotografías sumnistradas/ SENA


REGISTRO DE LA PRIMERA promoción de egresados del SENA en Girón.






Fotografías suministradas / SENA
REGISTRO HISTÓRICO DE algunos momentos de la vida del SENA en Girón a lo largo de 45 años de aporte a la industria en Santander, Colombia y el mundo.

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